ECOSISTEMAS
La Alpujarra presenta las características propias de
la Región Mediterránea, aunque sus características
climáticas, altitud y latitud determinan que de los 5
pisos bioclimáticos existentes en la Península
Ibérica, La Alpujarra posee en su territorio todos
ellos. En ello radica, por tanto, la extraordinaria
diversidad de ecosistemas y que van desde los
bosques y matorrales costeros, hasta los pastizales
crioromediterráeos de Sierra Nevada. Aunque la
distancia sea mínima, nos hace ver las grandes
diferencias existentes, debido a la altura, entre los
dos ecosistemas mencionados y hace posible que
especies usualmente muy distanciadas, convivan en
esta región a menos de 40 km. de distancia. Existe
otro importante ecosistema que trataremos en otra
ocasión y que también está presente en La
Alpujarra: el ecosistema marino desde el Cabo
Sacratif a Punta Entinas.
La riqueza vegetal y faunística supone, de algún
modo, una gran parte del patrimonio medio-
ambiental de esta región. Afortunadamente cada día
existe una mayor preocupación, no sólo a nivel
individual sino a nivel de administraciones
públicas, para que este patrimonio sea respetado,
conservado y a su vez utilizado.
La flora de La Alpujarra y por extensión la de Sierra
Nevada, es una de las floras más valiosas de toda
Europa, con más de 2.000 plantas catalogadas de las
cerca de 8.000 que existen en la Península Ibérica. Se
exponen en estas páginas de una forma breve los
ecosistemas y algunas de las especies más
representativas, como prueba de la enorme
biodiversidad existente en esta zona.
Alta montaña
En este ecosistema radica
el enorme valor de La
Alpujarra y de Sierra
Nevada, prácticamente el
40 % de las especies de
flora que aquí se
encuentran son
endemismos. Se
contabilizan más de 60
especies exclusivas en
Sierra Nevada, entre ellas,
la estrella de las nieves, la
amapola de la sierra, la violeta de Sierra Nevada y la
manzanilla de la sierra son las más conocidas.
La alta montaña está sujeta a condiciones climáticas
extremas y presenta, además, una estructura de la
vegetación muy simple, su fauna de vertebrados es
pobre en número de especies (normal en este
ecosistema). Actualmente hay pocos representantes
típicos de alta montaña en esta sierra: culebra lisa
europea, acentor alpino y topillo nival, entre los
reptiles, aves y mamíferos respectivamente. Cabe
destacar la comunidad de artrópodos que habita en
este biotopo, por una parte, aunque un alto
porcentaje son especies endémicas y por otra a la
adaptación que estas especies tienen a unas
condiciones sumamente duras y restrictivas.
Los ecosistemas de las Altas Cumbres y la Alta
Montaña de Sierra Nevada, son quizás, la razón que
más ha pesado en la declaración de Parque
Nacional.
Pinares y sabinares
Los pinares representan
un biotopo de alto valor
ecológico. Permiten la
presencia y mejor
distribución de algunos
vertebrados con vocación
forestal, como son la
salamandra común, el
sapo partero y las dos
especies de eslizones
presentes en la
Península.
El grupo de vertebrados
más claramente favorecido es el de las aves, con
especies que aquí ocupan de forma exclusiva, o casi,
el pinar, como son el cárabo, piquituerto, carbonero
garrapinos, herrerillo capuchino, pico picapinos,
azor; estas especies, en caso de no existir los pinares,
no estarían presentes o sólo lo estarían de forma
esporádica.
Bosque caducifolio
Este ecosistema presenta uno de los biotopos más
diversificados en lo que a los artrópodos se refiere.
En cuanto a los vertebrados podemos encontrar al
sapo partero entre los anfibios, la escasísima culebra
lisa europea y el eslizón tridáctilo entre los reptiles,
y una diversa y rica comunidad de aves forestales
como el gavilán, mosquitero patialbo, arrendajo,
picogordo y torcecuellos, por solo citar algunas de
las especies más interesantes nidificantes.
Por último, algunos discretísimos y escasos
mamíferos de tamaño medio, encuentran
tranquilidad y cobertura en estas aisladas masas
forestales; son el tejón, el gato montés y la garduña.
El encinar
La comunidad de vertebrados de los encinares es la
más rica que podemos encontrar en el conjunto de
los biotopos de esta región. Al menos habitan este
medio cuatro especies de anfibios, doce reptiles,
cuarenta y cinco aves nidificantes y dieciséis
mamíferos. El alto número de especies está
motivado, entre otras razones, por el carácter abierto
y arbustivo que presenta esta formación vegetal.
Este biotopo es la formación forestal típica del
paisaje mediterráneo, aunque faunísticamente sus
elementos son mayoritariamente norteños,
especialmente en el caso de las aves. En cuanto a los
artrópodos, esta comunidad vegetal soporta una
gran biodiversidad.
Bosque de ribera
En este biotopo, no sólo
se encuentran animales
relacionados con la
vegetación de galería,
sino que hay otros
exclusivamente
presentes por su relación
directa con el agua, como
son algunos reptiles,
aves y mamíferos
específicamente
acuáticos.
En cuanto a los artrópodos encontramos tres
biotopos: los cursos de agua, la ribera y el bosque.
NATURA